Empezar primero de Bachillerato fue toda una aventura para mí. El inicio de una nueva etapa en un colegio totalmente diferente, donde todo lo veía extraño y ajeno (nuevos profesores, nuevos compañeros, asignaturas pesadas...) supuso un reto difícil y agotador. Sin duda, adaptarme al cambio fue un proceso muy lento, pero nadie me dijo la experiencia que iba a vivir durante estos dos días.
Todo comenzó cuando me encontraba en primero: dos compañeras y yo fuimos elegidas para participar en “Becas Europa”, siguiendo como único criterio la nota media de la primera evaluación. Fue ahí cuando me enteré de la existencia del programa, y aunque en un primer momento no estaba segura de poder pasar las fases, decidí lanzarme a esta nueva experiencia con el fin de aprender lo máximo.
“Becas Europa” es una iniciativa promovida por el Banco Santander y la Universidad Francisco de Vitoria para potenciar el talento, premiar la excelencia y apoyar la creación de liderazgo. El programa tiene como objetivo inculcar a los participantes la historia, esencia e ideales de la universidad, que nació en Europa, para despertar en sus futuros alumnos la actitud del verdadero universitario.
Para ello, Becas Europa selecciona de 1000 alumnos de España a los 50 mejores que cumplan el perfil necesario en un largo proceso de selección. De este modo, los ganadores podrán compartir la experiencia de un viaje de 20 días alrededor de Europa, visitando las principales universidades y participando en un programa de conferencias, encuentros con personalidades de primer nivel del mundo académico, político y cultural y participando en actividades culturales y de ocio.
El proceso de selección consistía en lo siguiente: en primer lugar tenía que contestar por internet a una serie de preguntas sobre mi personalidad y mis aspiraciones. Si lograba pasar la fase, lo siguiente era una entrevista presencial, donde junto a nueve personas más debíamos ponernos en común para crear un invento que ayudase a los ciegos, de este modo se evaluaba nuestra capacidad de trabajar en grupo. A continuación, la fase siguiente consistía en grabar un vídeo de un minuto donde debía enseñar quién era yo, mis objetivos en la vida y por qué debían elegirme en los 50 mejores. Conforme iban pasando las fases, no podía creer que cada vez estuviera más cerca de la final.
Finalmente, debía hacer un trabajo con cinco personas de diferentes ciudades centrado en mejorar algún aspecto de las condiciones de los refugiados y exponerlo a tres jueces en la Universidad Francisco de Vitoria en Madrid. En efecto, los 299 finalistas de toda España y yo viajamos hasta Madrid (todos los gastos pagados por el programa) en plenos finales de segundo de Bachiller... Esta etapa fue la más difícil para mí en cuanto a esfuerzo emocional, ya que compaginar el trabajo de Becas Europa con los estudios me supuso un gran agotamiento, pero seguí trabajando duro para cumplir mis metas.
Esa final en Madrid valió la pena: hicimos actividades en grupo, presenciamos charlas de figuras importantes en el mundo que nos alentaran a perseguir nuestros sueños, pude conocer a gente maravillosa con mis mismos intereses y preocupaciones y lo más importante: descubrí que con voluntad, constancia y esfuerzo puedo crear proyectos y construir sueños que se hagan realidad con el fin de hacer un poco mejor el mundo.
Sin duda aprendí muchas cosas, pero ser uno de los 50 mejores de España no es fácil. Al final no fui escogida para el viaje, pero haber llegado hasta ahí fue toda una victoria ya que todo lo aprendido lo aplicaré en mi futuro, seguiré mi meta y por mucho que cueste, sé que mi esfuerzo tendrá su recompensa.
Si estás leyendo esto y aún no sabes a qué dedicarte, te aconsejo que pienses en algo que te gusta (matemáticas, castellano, biología...), pero no en lo que se te da bien o mal, sino en cómo puedes aportar tu granito de arena en el mundo, al mismo tiempo que eres feliz haciendo lo que amas. Una vez mentalices aquello que te gusta, lucha por ello y permítete todas las caídas que hagan falta ya que cada vez que te levantes, estarás más cerca de tu sueño.